Acercamiento cronológico a la historia
del kung fu en Costa Rica
La influencia cultural
oriental china, data en el país desde 1855 con la llegada de los primeros
migrantes chinos como obreros para la construcción del ferrocarril, así como
otras oleadas que desembarcaron en el puerto de Puntarenas posteriormente, y
con historias bastante tristes de incluso esclavitud (venta y escogencia de
trabajadores) durante el periodo presidencial de Tomás Guardia.
Podríamos especular que,
entre esos migrantes, provenientes de Hong Kong, Cantón, Taiwán, Macao, entre
otros lugares, en donde venían incluso familias, llegaron algunos practicantes
de artes marciales que continuaron la herencia de generación en generación. Sin
embargo, eso sería, como dijimos al principio, solamente una especulación,
porque a pesar de que sabemos que sí hubo enseñanza familiar de artes marciales
por algunas historias de tradición oral, no existe registro escrito alguno que
lo confirme…
Por lo que debemos adelantarnos hasta la segunda mitad del siglo XX… entre esas
historias orales más cercanas que sí logramos conocer a sus protagonistas, y de
los que sí hay testigos presenciales, hablaremos para empezar.
Pero antes de contar sobre esas historias y sus protagonistas, debemos hacer
una introducción sobre el tema que nos ocupa.
A diferencia de otras artes marciales, el kung fu es un universo en sí mismo,
una gama completa de sistemas de artes marciales denominadas bajo el mismo
concepto. Quedándonos cortos, podríamos decir a grandes rasgos que este nombre
engloba, al menos, unos 300 estilos diferentes, divididos en categorías que van
tanto en diferencias geográficas, religiosas, o internas y externas. Para
hablar en general, cuando hablamos de diferencias geográficas nos referimos
sobre todo a la división entre estilos del norte y del sur de China (siendo
esta clasificación limitada si pensamos en la gran extensión del país de
oriente), en cuanto a la categorización religiosa es un poco más simple, y se
divide sobre todo en estilos de origen filosófico budista y taoísta (siendo
estos dos los más grandes), y en lo que se refiere a interno o externo, es una
clasificación que depende sobre el énfasis energético de sus estilos, si son
más físicos o más de energía interna o técnicas de respiración.
Siendo extremadamente reduccionistas, podríamos decir que se le denomina Kung Fu
(gōngfu en pingyn) a
cualquier estilo de artes marciales de origen chino. Y si nos detenemos a
hablar propiamente del término, y de su literalidad, la traducción no es exacta
sino más bien conceptual. Cesar Vallejo, el poeta peruano, decía que toda
traducción es una traición, pero aventurándonos a esa traición, podemos resumir
el término en una acción o actividad que es llevada a la maestría a través del
esfuerzo, la constancia, la disciplina y el tiempo. Más literal, Gong podemos
traducirlo como “mérito”, y Fu como “maestro” o “maestría”. Y es un término que
se puede aplicar, como vemos, a cualquier actividad humana, pero se ha
generalizado para hablar en específico de las artes marciales chinas.
Sobre la evolución del mismo, podríamos hablar desde El Arte de la Guerra de Sun Tzu del s. VI a.C, pasando por la historia/leyenda
del monge Bodhidharma (Damo “Tamo” en chino), quien
viajó desde la India en el año 527 para expandir el budismo Chan, y se instaló
en el Templo Shaolin (templo del pequeño bosque, literalmente). En donde
desarrolló sistemas de ejercicios y defensa para que los monjes se mantuvieran
físicamente sanos, y además pudieran defenderse de piratas o ladrones. Si bien
esa es la historia más expandida y conocida, no se descarta que ya en el
monasterio hubiera monjes que habían sido ex soldados buscando refugio, o que
tuvieran conocimiento previo de técnicas de defensa y ataque. En todo caso, se
le reconoce al Templo Shaolin como la cuna de las artes marciales chinas y, por
ende, del Kung Fu. Más recientemente, posterior a la Revolución Popular, también
se le conoce como Wushu, término que ha utilizado el gobierno chino para
incluso introducirlo como deporte olímpico en una modalidad más deportiva o de
exhibición.
Muy bien, una vez puestos en contexto, regresamos a Costa Rica al siglo XX.
Entre esas historias que sabemos antes de 1970, y que diremos (a falta de
material escrito), son los precursores en el país, podemos nombrar a don
Enrique Yip.
Don Enrique enseñaba a sus familiares o amigos cercanos un sistema proveniente
directamente de la Ópera China, denominado Guiming gong fu, que, según decía él
mismo, era un sistema descendiente directamente de Shaolin. Sin embargo, don
Enrique enseñaba a puerta cerrada, y no recibía estudiantes más que los que
nombramos anteriormente… don Enrique fue además un gran entusiasta de la danza
del león, de la música tradicional china, y médico tradicional chino. Don
Enrique falleció en el año 2012, pero dejando mucha herencia cultural de sus
conocimientos.
Otro de los que daba clases de Wing chun a su familia, fue el Sifu Jaime Tang,
quien posteriormente sí abriría una escuela para el público en general, y que
hasta el día de hoy, sigue operando y es reconocida su trayectoria en el kung
fu, y específicamente en el Wing chun. Sifu Jaime Tang además tiene un
consultorio de reflexología, y otras técnicas de Medicinaa Tradicional China.
Ha graduado a muchos estudiantes, entre ellos al Sifu Luís Valverde quien
también se dedica a enseñar el Wing chun.
Es muy probable que se nos escapen muchos nombres de quienes daban kung fu
entre sus grupos familiares, pero por las limitaciones de la investigación, y
la carencia de documentos escritos, pecaremos de omisión, no sin antes pedir
las disculpas del caso por los maestros que por desconocimiento no se
encuentran aquí nombrados.
Ya propiamente si hablamos de los precursores con una escuela o enseñando al
público en general, debemos situarnos a principios de la década de los 70.
Cuando llegó proveniente de Hong Kong un joven maestro llamado Lan Man Lau que
venía enviado por sus padres, debido a algunos problemas disciplinarios propios
de la juventud, pero quienes pensaron era buena idea enviarlo a Costa Rica para
que buscara trabajo, madurara, e hiciera su vida. Así llega al país, cargado de
conocimiento en artes marciales, específicamente en el estilo propio de su
familia Lam Kaa Kim (o boxeo de la familia Lam, que había aprendido desde sus
tempranos 6 años de edad). El
Maestro Lam Man Lau además de aprender el sistema de su familia Lam Kaa Kinm, aprendió
Siu Lam (Shaolin del Sur/Hung Gar) y Pac Hok (Grulla Blanca) del Maestro Chan
Fai. Y aprendió Choy Li Fat de la línea de Fat Sam de su tío Lam Koo.
Precisamente este último estilo, una vez que consigue empleo como cocinero en
un restaurante, empieza a enseñarlo al público en general en el Gimnasio Costa
Rica. Es así como posiblemente esta sea la primera escuela formal de Kung Fu
del país.
Entre sus alumnos más destacados figuran Sifu Gerardo Zuñiga, Sifu Delfi
Bonilla, Sifu Gilbert Obando y Sifu Augusto Rizzo. Posteriormente en 1985, Sifu
Lam Man Lau reabre su escuela, en donde admite como estudiante a Sifu John La
Touche, a quien le enseña no solo Choy Lee Fut, sino también Siu Lam (Hung
Gar), Chi Kung, y Danza del León. En 1997 Sifu Lam Man Lau se regresa a Hong
Kong debido a la muerte de su padre, por lo que debe hacerse cargo de los
negocios familiares.
Los sifus nombrados anteriormente prosiguen sus enseñanzas, añadidas a otras
más, y tienen sus escuelas y centros de artes marciales, bastante reconocidas
en el país sobre todo en el estilo del Choy Lee Fut. Así también de estos sifus
aprenden otros maestros como Sifu Ronaldo Aguirre, Sifu Ricardo Brenes, entre
otros.
Al mismo tiempo, en la década del 70, el maestro
Wang Sing Kem empieza a dar clases de Kung Fu del norte (Shao Lin Chuan), y Tai Chi Chuan, en la sede de la
Asociación China Costarricense. De este maestro su estudiante más conocido es
el sifu Larry Picado, quien empezó su aprendizaje en el año 1978, y
continuaría practicando y
enseñando Kung Fu y armas tradicionales del Kung fu.
Por esas fechas de los años 70, llega al país un joven quien estuvo viviendo en
Estados Unidos, y trajo consigo un estilo completamente nuevo para el país. El
Karate Kempo Americano. Un estilo híbrido desarrollado en Hawái por Ed Parker.
Lo nombramos aquí, porque dicho estilo además de tomar influencias de variados
estilos japoneses, se basa también en el kung fu (Wing chun y Jeet kune do). El
nombre del muchacho es Oscar Domingo (Óscar Campos, su nombre real), y es
conocido en la escena nacional por ser un cantante popular con mucha
trayectoria musical. Pero antes de eso, fue incluso campeón mundial juvenil de
karate. Su escuela estaba en barrio La Cruz, cerca de la esquina suroeste de
Plaza González Víquez.
Entre sus estudiantes más recordados de esa época están el sifu Gerardo
Villalobos, quien tiene su escuela de Kung fu wing chun, y el sensei Jorge
Hernández, reconocido árbitro nacional en cantidad de torneos de artes
marciales, y practicante de diversos estilos, y maestro de karate por más de 22
años.
Nuevo siglo
Como es de suponer, todos los sifus nombrados anteriormente continuaron
el legado de sus maestros, siguieron practicando en conjunto y por separado,
abrieron sus propias escuelas, formaron a sus propios discípulos, cinturones
negros, y estudiantes. Todo esto en el transcurso de la década del 80, y 90. Ya
para esta última década del siglo XX es muy difícil rastrear a cada uno de los
maestros, y las ramificaciones que se han formado a partir de estas primeras
escuelas.
Pero, por ejemplo, (y solo para nombrar una de las escuelas formadas en esta
década como legado de las que nombramos anteriormente) en 1996 el Sifu John La
Touche abrió su escuela formal de Artes Marciales a la que llamó Centro de
Artes Marciales Sheng Long, que se ubicó en Tibás, justo al frente del
restaurante Antojitos, y por los próximos tres años estuvo en diferentes
locaciones. Incluso entrenando un tiempo en las bodegas de lo que era la venta
de repuestos automotrices Diluno, cerca del estadio Ricardo Saprissa, para
luego trasladarse al Paseo Colón cerca del colegio don Bosco.
Ya cerca del nuevo milenio, aparece en la escena
del Kung Fu nacional otro maestro proveniente de Estados Unidos en donde estuvo
realizando sus estudios, practicando artes marciales, y asesorando a algunas
fuerzas de seguridad desde la década del 80. Cuando llega al país se dedica
igualmente a trabajar con la Escuela Nacional de Policía y a dar clases
privadas de Tai Chi Chuan, y de Jing jow Pai- Garra de águila. Su nombre shifu
Victor On. Quien a mediados del 2001, por sugerencia de uno de sus maestros,
decide abrir su propio centro de artes marciales, que continúa hasta la
actualidad.
Por el
año 2002, un maestro originario de Macao, con un estilo llamado en español
“Cinco tigres bajo la montaña”, que proviene directamente del Hung Gar, un
estilo sureño, decide reunir a un grupo de diferentes practicantes de kung fu
de variados estilos bajo lo que él mismo denominó “shaolin”. Su nombre es Shifu
Iat Hoy Chen. También conocido como “Sifu León”, por ser un gran entusiasta y
maestro de la danza del león y del dragón. Dio clases en el país hasta el 2004
antes de regresar a China, pero su legado fue muy importante para el desarrollo
del kung fu en el nuevo milenio en el país.
Otro sifu quien por esa misma época, alrededor del 2002-2003, empezó su trabajo
en Wing chun de la mano de su Si-Hing Andrés Wormull de Chile, y posteriormente con el sifu Cemil Uylukcu, fue el Sifu Marco Gómez, quien en la
actualidad practica y enseña dicha disciplina en su escuela proWES, y ha
traído a Costa Rica para dar seminarios a diferentes sifus especializados en
wing chun de diferentes partes del mundo.
Para el
año 2005 el shifu Francisco Lee, después de haber entrenado con algunos de los
sifus nombrados anteriormente (incluído sifu León) funda su escuela Organización
Costa Rica de Disciplinas chinas y Kung Fu del Templo Shaolin, impartiendo,
Kung Fu, Tai Chi, Wai Chi Liao Fa, y Medicina Tradicional China.
A partir
del Año 2010 dicha escuela pasa a ser parte del Templo Shaolin de China y
cambia el nombre a Templo Shaolin Costa Rica. El 16 de Setiembre del 2013 en el
Templo Shaolin de China, el Shifu Francisco Lee obtuvo su discipulado y recibió
el nombre de Shi Yan Teng directamente del Abad del Templo Shaolin Shi Yong
Xing, quien es el máximo representante del budismo Chan en el mundo.
A su vez, tres años después, el 26 de
Setiembre del 2016 también en el Templo
Shaolin de China, la Shifu Nathalie Guillemard obtuvo su discipulado, y recibió
el nombre de Shi Yan Miao directamente del Abad de Templo Shaolin Shi Yong Xing,
convirtiéndose con esto en la primera Shifu mujer del país.
Para el año 2020 la cantidad de escuelas que han surgido a partir de estas que
hemos nombrado ha sido grande. Muchos cinturones negros, Laoshi, y otros han
fundado sus propias escuelas o centros de enseñanza a lo largo de todo el
territorio, y sabemos que hay enseñanza del kung fu desde Talamanca, Buenos
Aires de Puntarenas, Guácimo, Guanacaste, y ni qué decir de toda la zona
metropolitana. No los podríamos mencionar a todos porque serían más las
omisiones, y tampoco sería justo... Igualmente sabemos que posiblemente en esta
recopilación se nos haya escapado quizás más de un nombre de los precursores,
pero hemos intentado ser lo más imparcial, justos, y abarcar la mayor cantidad
de la historia conocida del kung fu en Costa Rica, y a la vez sumar todos los
nombres que hemos podido localizar. Así que para no herir susceptibilidades o
egos (más de los que ya pudimos herir, por omisión involuntaria), dejaremos la
historia hasta aquí. Esperando que el kung fu siga evolucionando, interesando a
muchos más, y teniendo muchos practicantes en nuestro país que continúen con
esta tradición y herencia milenaria.
Una de las principales características de cualquier arte marcial, es el respeto
por los maestros. Es una tradición y una formalidad muy arraigada, por lo que,
con esta recopilación de la historia en el país, es nuestro objetivo mostrar el
respeto correspondiente a todos los sifus que nombramos. Sirva también como un
merecido homenaje por su dedicación, empeño, trabajo, disciplina, esfuerzo, es
decir, gracias por su Kung Fu maestros, y por haberlo desarrollado y expandido
en nuestro país. Xiexie, Amitofo.
Recopilador:
Alejandro Cordero.
Agradecimientos:
Shifu
Francisco Lee.
Sifu John La Touche
Sensei Enrique Gómez Ross
Saludos Alejandro soy el Shifu Jose Ali Loaiza de aqui de Buenos Aires de Puntarenas actualmente tengo un grupo de fuerzas de seguridad y policías mi academia se llama academia de kung fu shaolin Hei Hu Quan, mi estilo es el puño del tigre negro y me detuve haver su publicación y es excelente. Amithaba!!!
ResponderEliminarHola, mi nombre es Marvin Martínez Méndez, le felicito por tan valiosa información. Yo entrené dos años con Lan Man Lau uno de los mejores maestros de kung- fu que he conocido, yo comencé a entrenar artes marciales desde el año 1987 a mis 12 años de edad.
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